entrada:Me levante en la madrugada y note que adalia aun no estaba dormida, me levante de mi cama y con pasos muy suaves llegue asta la puerta pero no entre, me quede escondida contra la pared, adalia tenia una conversación algo fuerte con un apuesto hombre de ojos azules hielo , piel blanca casi transparente y con una mirada muy fuerte, calle y empecé a escuchar , ya se que aquello era mala educación pero en ese no me interesaba.
- no, no la obligare a hacer eso solo por que tu digas.-dijo adalia con la mirada en el suelo.
- Jajaja me párese que no entiendes , si esa mocosa no domina bien sus dones nunca ganare.-dijo el levantándole la cara.
- Pero es que nose si lo soportara.-dijo adalia casi gritando
- hay por mi , pues claro que lo soportara por algo la elegí.
- No.
- Que?.- dijo desafiante aquel joven
Aquel joven tenia una fuerza enorme , alzo sus brazos pero sin tocar un solo cabello de Adalia la estrello contra la pared, en ese segundo entre yo casi asfixiada del miedo que sentía.
- déjala!!.-le dije gritando
- ohh!! Pequeña que haces despierta a esta hora?.-me pregunto con una cara de ternura
- que le haces a adalia?.- le dije muy acelerada
- ouh!! Ya la bajo.- al mismo instante empuño la mano y adalia callo al suelo.
- Corre .- me dijo adalia mirándome con maldad
- Que?.- no encendía nada.
- Que corras maldita sea.-me dijo gritando
No se porque pero en ese mismo instante me eché a correr Salí de la gran mansión ,entre al jardín que paresia un bosque, alejaba las ramas lo mas rápido que podía , me canse y decidí parar
- hola chiquita.-me dijo aquel joven
empecé a retroceder lentamente
- sabes quien soy yo?
- Nn no .-dije entre pausas nose que me pasaba ni siquiera podía hablar bien
- Yo soy quien te dio esta nueva vida.-me dijo con una risa 1000 beses mas macabra que la de Adalia, lo mire extrañada
- Yo soy lo que tú tienes adentro.
- Tu eres mi cuerpo tu y yo somos uno
- tu y yo solo uno.-dije esas palabras salieron solas de mi boca.
Deje de retroceder nose porque pero entendía ya todo esto, yo y el solo éramos uno, empezaron a pasar pensamientos muy oscuros , llenos de sangre y muertes, empecé a reír como loca sin saber de que , nada en ese momento era de gracia, almenos para una persona normal.
- ya entendiste.- me dijo acercándose cada ves a mí solo que yo ya no retrocedía junto mi mano con la de el, un grito desgarrador sonó en todo en gran jardín, era yo.
Caí mirando fijamente al suelo ,el ya no estaba , la mano me ardía horriblemente.
- vamos te llevare a descansar .- me dijo adalia levantándome del suelo
me cargo en sus brazos y nos separamos rápidamente del suelo , me llevo hasta la terraza de mi habitación , camino hasta estar afrenté de mi cama y me tiro bruscamente.
- coño porque eres así?.-le pregunte sobandome
- tu serás peor.- me contesto a lo que cerraba la puerta
…
En la mañana de ese mismo día desperté rápidamente , me coloque lo mas cómodo que encontré y baje .
- como estas?.- me pregunto adalia
- me arde la mano.- le dije mirándome
- eso es normal .
- nada es normal
- cállate y come.
- señorita Adalia su baño ya esta listo.- dijo una sirvienta inclinándose
- ven por favor.- le dije algo con cara angelical
Aquella joven sirvienta se acerco a mi , mire mi mano uní mis dedos índice y medio y le toque suavemente la frente , ella se coloco de un blanco verdoso y callo al suelo, sentía un gran alivio ya casi no me ardía , era como una droga.
-jajajajaja .- se empezó a reír descontroladamente adalia
Yo solo mire mi mano y la coloque tapando mi boca , las lagrimas bajaban de mis ojos.
-de que lloras, para nosotras nada esta mal aceptó hacer el bien.-me dijo colocando su codo en mi hombro y mirando el cadáver, pero yo savia claramente lo que había hecho, me avía comido su alma.
Corrí llorando destino a mi habitación , al mirarme en el espejo quite lentamente de mi cara la mano ,y al mirarme tenia aquella misma sonrisa del joven de la madrugada.
- esa es mi chiquilla .-dijo apareciéndose detrás de mi
empecé a reír casa ves mas y mas
- me alegra que te guste.-
-quiero algo.- le dije , a lo que en respondió arrodillándose ante mi.
- que quieres?, me encantara darte un regalo por tu primera alma.-
- quiero unas alas como las de adalia.- le dije
- voltéate.- seguí sus ordenes a lo que el coloco sus frías manos en mi espalda, pero no era lo que yo pensaba, me sujetó de la cintura , tirándome por la terraza.
Solo cerré los ojos , pensaba cada segundo en el dolor que sentiría al pegar contra el suelo , pero caí como una pluma, suavemente.
-pues creo que aun no es el momento.- me dijo sarcásticamente.
- angell casi me matas del susto.-dije riendo
-angell?.- me dijo confundido
- si angell te llamare así.- dije levantando una ceja
- OK me llamare angell.-me dijo riendo suavemente.
